Todas las actividades laborales representan para los trabajadores un porcentaje de riesgo de sufrir un accidente; unas más altas otras menos, pero en definitiva las posibilidades de lesionarse durante la jornada de trabajo son una parte del quehacer. Por ello es necesario saber en qué circunstancias funciona una papeleta de conciliación por accidente laboral en Madrid y eso es el tema que abordaremos.
Lo primero que debe tener en cuenta es que debido a fallas en los equipos e instrumentos necesarios para ejecutar alguna actividad, por exposición a gases tóxicos o químicos, caídas, malas posturas e incluso de camino al trabajo o en el retorno (teniendo en cuenta determinadas condiciones), puede ocurrir un hecho lamentable que requiera el reclamo de una indemnización.
Lo anterior no significa que se dejará de tener en cuenta las precauciones necesarias tendientes a evitar cualquier eventualidad, al contrario, el trabajador debe contar con los materiales de protección que su oficio requiera, los cuales deben encontrarse en buen estado; estar al tanto del nivel de peligro al que se expone, así como también de las medidas a ejecutar en casos de accidentes a fin de aminorar los daños.
Todo lo anterior constituye una serie de acciones que tienen por objeto garantizar el resguardo de la integridad física del recurso humano, pero las mismas no garantizan un cien por ciento de seguridad. De igual forma suele ocurrir que por descuidos del jefe de la empresa se dejan de tomar medidas preventivas, aumentando así el peligro al que se exponen los trabajadores y siendo a futuro, las causas de los infortunios.
En este sentido, cuando tiene lugar un accidente laboral, el trabajador tiene derecho de exigir una justa indemnización que cubra los daños sufridos por la inobservancia de las normas de seguridad.
Ahora bien, previo a la demanda ante el juzgado se cumplirá con una etapa de conciliación, la cual inicia con la papeleta de conciliación, es decir, el escrito que el trabajador dirige al Servicio de Mediación, arbitraje y Conciliación de su jurisdicción para intentar resolver el conflicto sin necesidad de pleitos judiciales. Cabe resaltar que el nombre de estos organismos varía en algunas localidades.
¿En qué consiste el acto de conciliación?
Conciliar es una alternativa al litigio para dar solución a los conflictos; consiste en una opción a través de la cual las partes que están en conflicto, con ayuda de un tercero imparcial, buscan la solución al mismo de manera amistosa, es decir, sin acudir al litigio en los juzgados.
En ella, el tercero conciliador tiene la tarea de orientar a las partes, proponer soluciones que procuren beneficios para ambas y guiar el curso del encuentro hasta un convenio que resulte favorable.
Sin embargo, esto no siempre ocurre bien por falta de disposición en pactar o por la ausencia de alguno de los sujetos. Por tanto, llegar a un acuerdo no es obligatorio, pero sí lo es pasar por esa etapa como paso previo a la vía jurisdiccional.
Algunos opinan que se trata de algo sencillo, pero si se espera tener éxito, es menester contar con la asesoría de un buen abogado que evalué los pormenores de la situación y determine los derechos que le asisten.
Aspectos relevantes sobre la papeleta de conciliación
Al igual que la demanda, la papeleta de conciliación ha de cumplir con determinadas formalidades, por lo que si se presenta a manera de escrito propio es necesario realizarlo con cautela a fin evitar que se obvie información relevante.
Algunos sitios web oficiales ofrecen formularios para facilitar el proceso, sin embargo, lo mejor es acudir a un abogado laboral que se encargue de redactarla, toda vez que se requiere de experiencia para tener en cuenta los detalles que en caso de resultar infructuosa la conciliación, constituirán una ventaja durante la etapa judicial.
En cuanto al tiempo del que se dispone para su presentación, este es el mismo previsto para la demanda, es decir, veinte días, de los cuales se excluyen sábados, domingos y feriados.